APURIMAC: Javier Palomino VICTIMAS DE LA INJUSTICIA. Desde hace mas tres años los trabajadores de la Empresa Minera Misti Gold , en el Distrito de Virundo, Provincia de Grau , Región Apurímac, vienen enfrentando una situación crítica en el pago de sus remuneraciones, las cuales no vienen siendo canceladas por más de cinco meses y las condiciones de trabajo en la que laboran es igualmente pésima.
La historia empieza con una denuncia formulada ante la Dirección Regional de Trabajo de Apurímac, sobre la situación real en la que se encuentran estos asalariados y que ante este hecho la mencionada institución ordeno la inspección laboral de la empresa , cuestión que en circunstancias inaplicables hasta hoy, queda como un caso inusual y que la ley señala expresamente que estas inspecciones son en forma sorpresiva. Pero resulta que la empresa estuvo bien enterada de este hecho y que el día indicado procedió a esconder a los trabajadores ante la llegada del inspector, los cuales fueron enviados detrás de la colina con algún pretexto propio de la actividad concreta de la empresa. El hecho es que el inspector laboral no encontró ningún obrero dentro de la empresa, más que los otros trabajadores especializados y al retornar hacia la ciudad de Abancay se dio con la sorpresa que algunos obreros le esperaban en la carretera para darle a conocer la situación real en la que se encontraban todo sus compañeros.
Ante este hecho ilegal el inspector, procedió a proponer un multa de Noventa Mil Nuevo Soles (según fuentes no oficiales) a la autoridad correspondiente dentro del MTPE y que posteriormente se hiciera público el asunto, dándose a conocer por los medios de comunicación local. De esta manera se da inicio a un proceso administrativo dentro de la Dirección Regional de Trabajo, proceso que se va prolongando inmerecidamente por años enteros, primero debido a la insuficiente información legal de sus derechos por parte de los obreros ya que estos en su mayor parte son de escasa formación académica y no se deciden fácilmente a contratar los servicios de un abogado laboralista por la desconfianza general en el sistema de justicia y también por los limitados recursos económicos que poseen.
En estas circunstancias que los obreros puedan llevar adelante un proceso judicial en lo laboral, es ciertamente muy difícil y con poca posibilidad de éxito, a pesar de que la legislación tenga un carácter tuitivo a favor de los empleados.
Según la información actual que se posee los trabajadores mineros de la Región en su mayoría no están organizados en sindicatos, y este mismo hecho es la que dificulta aun mayormente la mejor organización para un adecuado resguardo de sus derechos laborales.
Lo que se acaba de describir no representa un asunto excepcional en el medio regional o nacional sino más bien lo común dentro de las relaciones laborales en nuestro medio, es la realidad misma, la cruda verdad que los grandes medios de información y voceros oficiales de la sociedad se esfuerzan por negarlo o ignorarlo. y se puede afirmar que la suerte que corren los trabajadores de los otros rubros de la economía nacional en su diferentes niveles, especialidades ya sean en las zonas rurales como las minas o las urbanas como la gran industria es el mismo flagelo que azota los asalariados de todo el país y el mundo.
“la cruda verdad que los grandes medios de información y voceros oficiales de la sociedad se esfuerzan por negarlo o ignorarlo”
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